Trucos para dejar de refunfuñar....en estos estresantes momentos de Vuelta a la rutina!

Volvemos a casa después de unas merecidas vacaciones...los que hemos tenido la suerte de disfrutarlas....Igualmente en Setiembre comienzan los nervios de la vuelta a la rutina, la organización de los horarios, los madrugones, las prisas....el estrés. Estrés que nos afecta a nosotros y también a nuestros hijos. Después de esa cara de autentico verano, de calma, aparecen los "no llego", los suspiros, los "venga calzate ya, que no llegamos". Por arte de magia, los músculos se nos contraen y desaparece la laxitud de nuestra mejillas....Y eso, los hij@s, también lo notan....

Os propongo una serie de Trucos para dejar de refunfuñar ante un conflicto con nuestro hij@. Porque en realidad no queremos tener ese estado de irritación y mal humor.... Cambiemos de programa:

1. Respira y habla muy bajo. Haz tres grandes respiraciones inspirando por la nariz y espirando por la boca para darte un nuevo aliento. En vez de gritar baja el tono de voz.

2. Siéntate en el suelo. ¿Quieres imponerte? Haz lo contrario!. Ponte a su nivel, cógelo entre tus brazos. Hazle mimos, quizá su reserva afectiva esté al mínimo...

3. Haz una pausa: necesitas airearte para no explotar. Sal de la habitación, bébete un vaso de agua y piensa como gestionar la situación de otra manera.

4. Invierte los papeles. Ponte en su lugar durante unos minutos. Utiliza dos máscaras (padre, hijo) que intercambiarás para ver las cosas desde su punto de vista. Al tratar, de forma divertida de comprender lo que le pasa, te ganar su confianza...

Si la próxima vez que tu olla a presión esté a punto de estallar, logras controlarlo, enhorabuena! Has utilizado tu cerebro reflexivo antes que tu cerebro impulsivo...