SISTEMA EDUCATIVO Y CULTURA DIGITAL
¿Puede la escuela, el instituto y la Universidad vivir de espaldas a la cultura Digital?. En principio esta pregunta puede resultar muy densa. Tendríamos que situarnos primero en la posición actual de la escuela, pasar después a definir qué es la Cultura Digital y luego establecer sus relaciones. Esto sería un poco extenso...
El objetivo de esta página, sin embargo, es simple: exponer una reflexión personal que tiene como inspiración la observación de cómo interactúan los niños y adolescentes hoy en día con el entorno digital y qué es lo que éste puede aportar para el aprendizaje en el aula.
Vivimos en una sociedad inmersa en una CULTURA DIGITAL, dónde los modos de comunicarse han cambiado para establecer entornos virtuales como las redes sociales, en las cuales nos sentimos como en el bar o en la plaza del pueblo, intercambiando pareceres y conversaciones. El móvil va con nosotros a todas partes y a través de él compramos entradas, chateamos con nuestra familia y amigos, producimos foto y video que luego colgamos y compartimos. Los niños ven el teléfono o la tableta como parte de su cotidianidad, como fuente de entretenimiento muchas veces y de distracción. También los adolescentes, para los cuales es casi un apéndice de su propia mano, una extensión de su cuerpo que le permite comunicarse con el resto del mundo.
¿Y dónde están en la escuela y en el Instituto? O sea, que en la calle, en el parque, con nosotros en todo momento... y sin embargo en la escuela no. ¿No os parece razonable que un adolescente prefiera chatear con alguien a "escuchar" la charla del profesor?Todos los días el niño o adolescente recibe millones de informaciones a través de numerosisimas fuentes ( cada cual más atractiva audiovisualmente y con grandes estrategias de márketing), además maneja muy habilidosamente la multitarea y, por lo general, tienen una enorme capacidad para buscar información. Sin embargo, pretendemos que todas estas habilidades y que sus motivaciones se queden en la puerta y en el aula esté dispuesto a escuchar durante una hora o a leer un texto por turnos...
En mi modesta opinión esto se debe a que el empleo de estos dispositivos choca frontalmente con cómo está pensada la metodología en el aula. Es decir, el alumno tendría que pasar de un sujeto pasivo, donde los conocimientos los adquiere mediante memorización y repetición, a construir el conocimiento a través del juego, de la conversación, a partir de piezas, de conceptos, de la investigación...
Hoy se están creando numerosos recursos, pero creo que debe cambiar la manera de organizar la educación para que este cambio sea efectivo y los recursos digitales no se conviertan en un "libro de texto" más, sino en una herramienta motivadora para aprender a aprender.
El objetivo de esta página, sin embargo, es simple: exponer una reflexión personal que tiene como inspiración la observación de cómo interactúan los niños y adolescentes hoy en día con el entorno digital y qué es lo que éste puede aportar para el aprendizaje en el aula.
Vivimos en una sociedad inmersa en una CULTURA DIGITAL, dónde los modos de comunicarse han cambiado para establecer entornos virtuales como las redes sociales, en las cuales nos sentimos como en el bar o en la plaza del pueblo, intercambiando pareceres y conversaciones. El móvil va con nosotros a todas partes y a través de él compramos entradas, chateamos con nuestra familia y amigos, producimos foto y video que luego colgamos y compartimos. Los niños ven el teléfono o la tableta como parte de su cotidianidad, como fuente de entretenimiento muchas veces y de distracción. También los adolescentes, para los cuales es casi un apéndice de su propia mano, una extensión de su cuerpo que le permite comunicarse con el resto del mundo.
¿Y dónde están en la escuela y en el Instituto? O sea, que en la calle, en el parque, con nosotros en todo momento... y sin embargo en la escuela no. ¿No os parece razonable que un adolescente prefiera chatear con alguien a "escuchar" la charla del profesor?Todos los días el niño o adolescente recibe millones de informaciones a través de numerosisimas fuentes ( cada cual más atractiva audiovisualmente y con grandes estrategias de márketing), además maneja muy habilidosamente la multitarea y, por lo general, tienen una enorme capacidad para buscar información. Sin embargo, pretendemos que todas estas habilidades y que sus motivaciones se queden en la puerta y en el aula esté dispuesto a escuchar durante una hora o a leer un texto por turnos...
En mi modesta opinión esto se debe a que el empleo de estos dispositivos choca frontalmente con cómo está pensada la metodología en el aula. Es decir, el alumno tendría que pasar de un sujeto pasivo, donde los conocimientos los adquiere mediante memorización y repetición, a construir el conocimiento a través del juego, de la conversación, a partir de piezas, de conceptos, de la investigación...
Hoy se están creando numerosos recursos, pero creo que debe cambiar la manera de organizar la educación para que este cambio sea efectivo y los recursos digitales no se conviertan en un "libro de texto" más, sino en una herramienta motivadora para aprender a aprender.
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